“Todos los años pasa lo mismo, cientos de quejas y reclamaciones, pero luego en cuanto comienza el curso se les olvida.” Se le podía escuchar a un funcionario de la Consejería de Educación, Empleo y Formación durante este verano en relación con la escolarización del segundo ciclo de Infantil en la Comunidad Autónoma de La Rioja.
Y es que, el sistema de escolarización riojano deja mucho que desear en todos los aspectos, equipos directivos, sindicatos, asociaciones de padres..., todos expresan su disconformidad y la Administración ni se inmuta, al contrario, saca la cara todos los años con unos datos que sabe perfectamente que no son del todo correctos.
Por ejemplo, en el barrio logroñés de Cascajos, nacen unos 150 niños todos los años y solo cuentan con un colegio público de referencia con 50 plazas al que, por norma general quieren ir la mayoría de ellos. Esto supone que entran el 33 % de niños ¿Es admisible que la administración diga que más del 95% han sido escolarizados en su primera opción? Todo el mundo entiende que es imposible poner un colegio para todo el mundo en la puerta de su casa, pero de ahí al inmovilismo total y además falsear los datos hay un mundo.
¿Cómo lo hacen? La respuesta es fácil, la elección final de las familias NO es su VERDADERA 1ª OPCIÓN, saben que si expresan su verdadera 1ª opción con las normas del sistema actual tienen muchas opciones de quedarse fuera y que se tengan que escolarizar a sus hijos en otros centros que no desean, así que las familias asumen que no van poder acceder a su 1ª opción deseada y optan por convertir su 2ª, 3ª u otras opciones en la que ponen en primer lugar en la solicitud de escolarización. El sistema les empuja a ello, los padres van de un centro a otro, hasta que encuentran plaza y dicen que quieren esa plaza en 1ª opción.
Con las normas actuales, todo el mundo lo sabe, si solicitas lo que quieres y no te informas de la situación te la juegas y te puedes quedar fuera. Muchos de los directores de los centros intentan ayudar a las familias, pero al final lo que hacen es resolverle el problema a la Consejería, llevando los niños de un centro a otro tal y como relatan varios directores de centros públicos cuando son preguntados. También dejó por escrito su experiencia personal en el 2013 un conocido periodista riojano en “La engañifa de la escolarización”.
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